Un nuevo análisis examina los vínculos de la industria contaminante con las iniciativas mundiales de “cero neto”
Este comunicado de prensa está disponible en inglés y francés.
SHARM EL-SHEIKH, EGIPTO — Algunas de las más destacadas iniciativas mundiales de “Cero Neto” tienen vínculos profundos y preocupantes con los mayores contaminadores del mundo, según un nuevo análisis de Corporate Accountability, Amigos de la Tierra Internacional (FOEI) y Coalición Mundial por los Bosques (GFC). A pesar de afirmar que tienen una “gobernanza independiente”, que “proporcionan una orientación objetiva e imparcial” o que “refuerzan las contribuciones al Acuerdo de París“, los vínculos de estas iniciativas con la industria hacen dudar cada vez más de su credibilidad y veracidad.
Análisis anteriores (más aquí y aquí) han demostrado cómo los mayores contaminadores del mundo están utilizando la agenda política de “cero neto” para evitar las reducciones de emisiones obligatorias y exigibles que se requieren para abordar de manera significativa el cambio climático. Ahora, mientras estas iniciativas se preparan para su próxima ofensiva de relaciones públicas en torno a la COP 27, este análisis ofrece otro motivo de escepticismo.
“Esto debería ser de sentido común. Si se quiere que una iniciativa global de ‘cero neto’ sea algo más que un lavado verde de la industria, no se nombra a quién es quién de las industrias contaminantes y sus financiadores para que ayuden a dirigirla y darle forma”, dijo Rachel Rose Jackson, directora de investigación y política climática de Corporate Accountability.
El análisis se centró en tres de las más destacadas iniciativas de “cero neto”, que han revelado próximas normas o publicaciones, incluyendo el Consejo de Integridad para el Mercado Voluntario del Carbono (Consejo de Integridad), el Grupo de Expertos de Alto Nivel sobre los Compromisos de Cero Emisiones Netas de las Entidades No Estatales (HLEG), y la Carrera hacia el Cero.
La presidenta de la junta directiva del Consejo de Integridad es consejera principal de un bufete de abogados, que asesora a grandes empresas contaminantes como ExxonMobil y Petrobras. En su anterior etapa, en la Comisión de Valores de Estados Unidos, fue acusada de estar “demasiado asociada a la débil supervisión federal que contribuyó al colapso bancario“.
Helena Viñes Fiestas, miembro del grupo de expertos de HLEG, fue la jefa de investigación de sostenibilidad de BNP Paribas, que fue el mayor financiador de combustibles fósiles en la UE entre 2016 y 2020.
Los bancos miembros de la Carrera hacia el Cero invirtieron más de 500.000 millones de dólares hacia los combustibles fósiles solo en 2021 y presionaron con éxito la iniciativa para que debilitara sus criterios de eliminación de proyectos de carbón.
Estos son solo algunos de los ejemplos.
“Este análisis no hace más que arañar la superficie de cuán conflictivas son estas iniciativas de ‘cero neto’. Muestra cómo no se trata sólo de que los contaminadores intenten crear una ‘credibilidad verde’, sino de cómo se posicionan para dar forma y obstruir el progreso de las políticas”, dijo Sara Shaw, coordinadora del programa internacional de justicia climática y energía de FOEI.
Cinco grupos de la CMNUCC, que representan a miles de organizaciones de todo el mundo, abogan por un marco de rendición de cuentas para la CMNUCC como medio importante para evitar que estas iniciativas tan conflictivas absorban el oxígeno de las conversaciones de noviembre y más allá. Un grupo aún más amplio de más de 425 organizaciones de la sociedad civil también ha hecho un llamado para frenar el acceso de los grandes contaminadores, a través de estas iniciativas y otras, a las conversaciones anuales.
“Durante tres décadas, los mayores contaminadores del mundo han tratado la CMNUCC como una feria comercial. Patrocinadores corporativos para las conversaciones sobre políticas públicas. Cientos de grupos de presión de la industria trabajando en los pasillos. Un sinfín de anuncios para iniciativas empresariales no vinculantes e ineficaces. Basta, la captura corporativa de este espacio debe terminar y los grandes contaminadores no pueden tener más voz en la CMNUCC”, dijo Coraina de la Plaza, del GFC.
